Por Melvin Rivera Velázquez
En Haití las calles siguen en estado de caos. Muchos pastores y sacerdotes han muerto víctimas del terremoto. Sin embargo, la gente se está refugiando en las iglesias que quedan, buscando consuelo. La gente sufre y pide la ayuda de Dios. La necesidad de tener la Biblia es más urgente de que lo que imaginamos.
Por eso, hoy jueves, las Sociedades Bíblicas Unidas estamos enviando el primer camión con alimentos vía República Dominicana y nos estamos preparando para imprimir en ese país más de medio millón de materiales bíblicos en creole y francés.
agda Victor, Directora Ejecutiva de la Sociedad Bíblica de Haití (SBH), está durmiendo a la intemperie porque su casa no es segura, y nos compartió lo siguiente:
«Quiero dar las gracias a todos por las oraciones y todas las muestras de afecto hacia nosotros. Dentro de todo, estoy bastante bien pero todavía sigo traumatizada. No he podido despertar de la pesadilla.
»Esta mañana visité el centro de la capital. El país está hecho un desastre total. Tenemos que reconstruirlo. Como cristiana oro también por la reconstrucción espiritual de mi país.
»Estoy pidiendo a Dios que me dé la fuerza suficiente para participar en esta reconstrucción. Hay una evacuación masiva, la gente se está yendo a países del extranjero o a las provincias, pero yo me quedaré porque Dios me llama a este trabajo.
»Necesitamos medicamentos y comida como arroz, maíz, guisantes, harina, aceite, sardinas, carne enlatada, leche, azúcar, agua, jugos, etc.
»En este momento, la ropa para el personal de la SBH es secundaria, sólo queremos lo que podemos entregar a nuestros hermanos.
»Gracias por las Biblias y material bíblico que la fraternidad de Sociedades Bíblica Unidas (SBU) y la American Bible Society (ABS) están produciendo. Muchos están sedientos de palabras de consuelo y nos preguntan por la Biblia.
»En todo el pueblo, las calles están llenas y muchos están orando. El aire no es saludable; hay olor a muerte.
»Gracias al pueblo por sus oraciones y ayuda; gracias a todas las Sociedades Bíblicas por la solidaridad mostrada en este momento de crisis y a todos en el mundo que nos acompañan en este momento de dolor.
El nuevo edificio de la SBH tiene el techo rajado y, aunque desde afuera se ve en buen estado, algunas paredes externas están quebradas y las autoridades no permiten que entren al mismo. Es un milagro que el edificio no se haya destruido porque está localizado en Canapé Vert, el área donde más daño hizo el terremoto. Hoy están tratando de entrar al edificio para sacar docenas de los «proclamadores» de «La Fe Viene por el Oír», reproductores de audio con la Biblia grabada en Creole, para comenzar a entregarlos al pueblo. Recordamos que el edificio antiguo quedó completamente destruido.
La Sociedad Bíblica Dominicana (SBD) y su directora ejecutiva, Carmen Checo, están coordinando la logística del envío a Haití de las donaciones que estamos recibiendo. El Servicio de la Iglesia Evangélica Dominicana que dirige el pastor Lorenzo Mota King, quien también preside la Junta Directiva de la SBD, nos ha conseguido un camión que el jueves llevará el primer cargamento de alimentos y medicinas a la frontera, donde nos esperará el personal de la SB de Haití. Las Asambleas de Dios también se han ofrecido para ayudarnos a llevar materiales a Haití.
La Imprenta Católica «Amigos del Hogar», una de las de más alta calidad en Santo Domingo, nos donó un descuento substancial para publicar cientos de miles de las porciones y selecciones bíblicas que serán distribuidas a todo el pueblo haitiano que llora desesperado y busca aliento de Dios.
La Sociedad Bíblica de Brasil sigue explorando cómo conseguir transporte aéreo para llevar 4.000 Biblias en francés y otros materiales a Haití.
La Sociedad Bíblica del Canadá está trabajando a todo vapor traduciendo al creole y al francés una porción y selección bíblica que entrará imprenta en unos días. También están enviando ayuda humanitaria y un cargamento de porciones en francés, en alianza con otros ministerios canadienses que tienen aviones que llegan a Haití.
Los jóvenes católicos del programa «Lectionautas» de la República Dominicana han conseguido donaciones de alimentos y los estamos ayudando a llevarlas a Haití.
Gracias a todas las Sociedades Bíblicas que han confirmado sus donaciones aun antes de recibir ofrendas del pueblo cristiano. Esto nos ha permitido iniciar estos envíos mientras llegan otras donaciones.
A todo el pueblo cristiano, recordemos las palabras del poeta cubano José Martí: «Buscamos la solidaridad no como un fin sino como un medio encaminado a lograr que nuestra América cumpla su misión universal». Hoy tenemos la posibilidad de cumplir nuestra misión como cristianos latinoamericanos: ayudemos al pueblo haitiano. Si no sabe cómo hacerlo, acérquese a la Sociedad Bíblica de su país; ellos le sabrán indicar cómo hacer llegar sus donaciones.
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